Ànima (Núria Ventura)

El mundo se hace pequeño, se mezclan las razas. Cada uno lleva la pureza de su cultura, pero en los países desarrollados, sobre todo en las ciudades se vive la fusión.

El flamenco puro, mezclado con otras tendencias, generalmente, pierde su esencia. Pero gracias a estas, con el tiempo y de una forma natural, el flamenco ha ido cogiendo otros matices, y por lo tanto, ha evolucionado.

Lo que se intenta en este espectáculo es abrir el Flamenco hacía otras vertientes, con lo cual, pueda ser entendible y llegar al corazón de personas de diferentes culturas.

El baile flamenco tiene la peculiaridad, a diferencia de otros estilos, de no expresar una idea, ni una historia, ni una situación social: sino un sentimiento real que viene del interior de cada artista. Por lo tanto, la coreografía y composición es momentánea y cambia según el sentimiento de cada intérprete.

La danza contemporánea, tiene otro concepto: expresa una idea que puede ser abstracta. Por lo tanto el baile necesita, en la mayoría de los casos, una coreografía y la música una composición que tengan congruencia desde el principio hasta el final.

La danza moderna, expresa una historia o una idea realista. La coreografía y composición son totalmente estudiadas. Desde las primeras tendencias modernistas que nacieron a finales del siglo XIX, la danza moderna floreció con Martha de USA a mediados del siglo XX. La técnica Graham, por ser dramática y con una dinámica de movimiento muy acentuada, se complementa muy bien con el estilo de baile flamenco.

El resultado es un espectáculo de extremos con una emocionante combinación de tradiciones: flamenco puro, danza moderna y contemporánea.

La música es Flamenco Puro y Contemporánea, con tendencias de jazz, rock y clásica. Hay momentos del espectáculo de Flamenco Puro, otros de música moderna y otros de Fusión. Todos los temas se basan en ritmos flamencos.

Los únicos instrumentos musicales incluidos en ANIMA que salen de la pauta del Flamenco Puro son la guitarra y el bajo eléctricos.