Troianes 15 (2015)

VIC: 3 de julio

ALTAFULLA: 11 de julio

BARCELONA: TEATRE AKADÈMIA del 13 de octubre al 8 de noviembre

Troianes 15 habla del papel de la mujer en la posguerra. O mejor dicho, del papel que se le adjudica, del lugar a donde se la relega. Las mujeres de Troya serán repartidas como trofeos de guerra para convertirse en esclavas y concubinas de los vencedores. No podrán quedarse para rehacer su tierra, no hay compasión para ellas, son humilladas y les arrancan su dignidad. La Reina de Troya, Hécuba, es informada por Taltibio, militar griego, que tanto ella, como su hija Cassandra, como Andrómaca, esposa de Héctor, su difunto hijo, serán entregadas a militares griegos.

A partir de ese momento la obra se adentra en el dolor y la lucha de estas mujeres por no aceptar lo inaceptable. Hécuba pasará a ser esclava de Ulises; Cassandra, la virgen, será la concubina de Agamenón y Andrómaca pasará a ser la mujer del hijo de Aquiles, y será separada de su hijo Astianax.

Ningún honor, ninguna dignidad para ellas, sólo existe la humillación. Esta realidad enciende sus iras y las ganas de revancha.Helena, la excusa de los griegos para empezar una guerra con la rica Troya, es la otra cara de la moneda, se vende al mejor postor y no tiene escrúpulos. Abandona a Menelao por Paris . Sin embargo, ahora ante el castigo del vencedor Menelao, despliega sus encantos para volver a ser su esposa, lo consigue. Una injusticia más para las troyanas.

La obra se centra también en el horror de la guerra, sus consecuencias devastadoras tanto para los vencidos como también para los vencedores. Cuando el miedo usurpa la razón. Habla pues del dolor, de la venganza, del sacrificio, del amor, y de la muerte. Cassandra: “Todo hombre sensato debe evitar la guerra”.

Cualquier guerra pequeña o grande es devastadora para todas las partes afectadas y para todas las personas, pero en todas, a parte de las atrocidades y la barbarie que el ser humano es capaz de provocar y sufrir al mismo tiempo, es a las mujeres a las que se las puede humillar, se las viola y se les toma la voz sistemáticamente. No me estoy refiriendo a una competición de sufrimientos entre sexos pero si al poco valor que tiene la dignidad de la mujer. Como sociedad necesitamos una reflexión profunda de lo que está pasando con la violencia de género, este comportamiento todavía demasiado arraigado y presente en todas las sociedades sea en un grado más o menos elevado o estén más o menos evolucionadas.

La obra Troyanas 15 me ofrece la posibilidad de reflexionar sobre el valor que damos a la dignidad, la voz y la opinión de la mujer en el siglo XXI. Sobre el comportamiento humano en situaciones de debilidad, miseria y dolor como en las guerras, que siguen tan presentes. Y me permite explicar y compartir una historia llena de complejidades y matices sobre las personas para comprender de manera más profunda cómo y quiénes somos.